Edición por Katiuska Chen Zou
Un ejemplo que magnifica el talento de las mujeres.
El FC. Barcelona femenino conquistó la primera Champions League femenina de su historia y lo hizo con absoluta autoridad ante el Chelsea, el mejor equipo inglés línea por línea. Un triunfo incontestable que confirma, no solo el talento de las mujeres para jugar fútbol al nivel más alto y competitivo, sino también el compromiso de los clubes deportivos para dotar a sus categorías femeninas de la infraestructura e inversión económica que merecen, para obtener el reconocimiento que por años se les ha negado a las mujeres deportistas.
Pero el éxito de las culés no es una sorpresa. Un equipo que a nivel táctico basa su forma de jugar en el llamado ADN Barça, una filosofía innegociable instruida desde las categorías bases y que consiste en tener la posesión del balón, generando el ataque desde su primera línea de defensa, incluyendo al portero, y jugando a un solo toque, llevando la iniciativa con la superioridad que genera tener la pelota. Un estilo que, en sus mejores años, se convirtió en la envidia del mundo.
A nivel estructural el club invierte seis millones de euros al año, el más alto de la Liga española, gracias al patrocinio de Stanley. Sin embargo, las azulgranas no están todavía a la altura de los grandes presupuestos europeos como el de Olympique de Lyon (7 veces campeonas de la Champions), que se calcula en unos diez millones anuales, o el propio Chelsea, que ronda los ocho millones. Un presupuesto con el que soñaría cualquier equipo de primera división de nuestra región centroamericana, pero que está muy por debajo de lo que invierte el Barcelona en su categoría masculina, en el que hasta el jugador ‘menos importante’ gana más, que la mejor jugadora del equipo femenino.
No hace falta tirar tanta matemática y sacar el Baldor para entender que, sólo el salario de Lionel Messi es abismalmente mayor que todo el presupuesto dedicado al desarrollo y pago de salarios de la categoría femenina, y paradójicamente, han sido las mujeres quienes conquistaron los títulos más importantes, que los varones fueron incapaces de obtener.
Los detractores dirán que el dinero y el ‘espectáculo’ lo generan los Messi, Cristiano, Haaland, Mbappé y Neymar.
Claro, en un sistema patriarcal donde las reglas de la economía deportiva fueron desarrolladas por y para los hombres, y donde las mujeres han sido históricamente invisibilizadas, es fácil pensar que sean ellos y no nosotras, “los dueños del negocio”.
Por décadas, las masas han sido adecuadas y culturizadas para venerar las figuras masculinas, y hacer de estos hombres, los ídolos de generaciones que nunca vieron en la televisión a una mujer con los mismos atributos jugando al fútbol, baloncesto o béisbol, porque el sistema simplemente las borró.
En consecuencia, hoy vemos una lucha encarnizada de grandes empresas dispuestas a realizar millonarias inversiones para hacerse con el patrocinio de equipos y figuras masculinas.
Una situación que está fuera de control y en nada beneficia el desarrollo del deporte de forma global y equitativa.
En Panamá, hace poco se dio un hecho histórico en el fútbol femenino. El patrocinio de Dorival al equipo del Tauro FC, fue un hito en la historia de nuestro fútbol, si tomamos en cuenta que es la primera vez que una empresa, de esta magnitud, decide apostar por el fútbol femenino en un país con una frágil estructura y desarrollo futbolístico, y donde hasta los equipos de primera división de la LPF tienen serios problemas para conseguir patrocinadores.
Por esto, es importante resaltar el deporte femenino, una categoría que teniendo muchos menos recursos que sus pares masculinos, han conseguido hacer historia.
Como lo hicieron las chicas del Barcelona en Gotemburgo o Suecia ante el Chelsea, dando una exhibición y demostrando que el talento es indistinto al género.
Una victoria que engrandece a las mujeres y da esperanza a las niñas que ven en el deporte, su estilo de vida y la forma de salir adelante.
Para saber :
• Tras la dura derrota sufrida ante el Olympique de Lyon en su primera final de la Champions en 2019, el Barcelona regresó dos temporadas después y endosó al Chelsea el mismo resultado que el Lyon les propinó a ellas en Budapest (4-1).
2 comentarios.
Muy buen artículo. Se necesita más prensa que apoye y ayude a destacar el deporte femenil.
En cuanto al Barfem, he de acotar que en las eliminatorias de la Champions el único que fue capaz de romper el esquema fue el ManCity, quiénes quedaron de segundas en el WSL Cup.
Hoy se juega el NCAA Championship femenino, y la jugadora Gina del Florida State acaba de anotar un hermoso gol al mejor estilo de Alex Morgan, lamentablemente, las ligas femeninas, WSL de Inglaterra, NSWL de Estados Unidos, la europea, etc., no tienen transmisión en la TV abierta, hay que seguirlas por Streaming y muchas veces, no están disponibles para nuestros países.
La selección femenina de Panamá tiene muy buenas jugadoras, pero hay deficiencia en la dirección técnica y en el interés de agendar juegos amistosos que le den experiencia y desarrollo táctico, clínico en la entrega de la bola y efectividad de marcar, generar en ellas la confianza de hacer el trabajo en cualquier escenario. Como dicen, hay material para trabajar, muy bueno, me atrevo a decir que tienen mejor desempeño que la masculina.
Le doy gracias porque por fín le dan valor a fútbol femenino, soy de Panamá san Miguelito y aunque el fútbol no tiene tanto apoyo aquí, ahí muchas chicas como yo que se esfuerza y da su 100% al salir a esa cancha con todas las cosas que pasamos seguirnos avanzado uniendo fuerza, ya hoy se ve el fútbol femenino esta siendo mas apoyado. Esperemos que nos apoyen más.